jueves, 29 de abril de 2010

Encuentro de Abraham y Melquisedec



Como hemos visto en los comentarios que se han hecho acerca de esta escena que proponíamos el pasado miércoles, se trata de un asunto en el que el pan y el vino adquieren protagonismo. Por tanto, se ha interpretado como una prefiguración eucarística.

La obra en cuestión es una tabla de Pierre Pourbus pintada en 1559 u que se encuentra en el museo de la catedral de San Salvador, en Brujas. Es una de las alas laterales, precisamente, del Tríptico del Santo Sacramento.

El asunto en cuestión aparece narrado en: Génesis 14: 18-24; Salmo 110 y Epístola a los Hebreos, 7.

La Biblia nos dice que, después de que Abraham y Lot se hubieron separado para evitar disputas entre sus pastores, cada uno tomó un camino diferente (Lot se dirigirá a Sodoma y su tío Abraham permanecerá en Canaan).

Pero Lot será apresado por unos reyes invasores y Abraham, después de liberarlo y hacerse con el botín de los mismos, se encuentra con Melquisedec.

Rey y gran sacerdote de Salem, según ciertos Padres de la Iglesia y Lutero, Melquisedec era en realidad Sem, hijo de Noé. Abraham le ofrece el diezmo del botín logrado a los reyes que capturaron a Lot -interpretado en la Edad Media como prefiguración de la ofrenda de los Reyes Magos al Niño Jesús- y Melquisedec le presenta el pan y el vino.

Esta prefiguración de la Última cena provocó que en el siglo XV se llamara melquisedec al viril de la custodia que guardaba la hostia consagrada.

Iconográficamente, Melquisedec se representa como rey-sacerdote, con corona y cáliz o incensario y, muchas veces, la corona se reemplaza por una tiara pontificia o una mitra episcopal. También podemos encontrar ejemplos, como el que pintó Ruben en 1625, hoy en la National Gallery de Washington (a la izquierda), en los que Abraham aparece a un nivel más bajo que Melquisedec, simbolizando la preeminencia de la autoridad eclesiástica sobre la secular.




Fuente: RÉAU, Louis, Iconografía del arte cristiano. Iconografía de la Biblia-Antiguo Testamento, pp. 158-160

Imágenes: http://fichero.ficonofue.com/ficono/ficha.php?reg=50899&accion=ver y http://www.wga.hu/frames-e.html?/html/r/rubens/13religi/07meetin.html

miércoles, 28 de abril de 2010

Iconografía profana: una escena curiosa

En esta ocasión, como nueva Iconografía oculta (aunque es bastante conocida y evidente), no he elegido un asunto religioso ni tomado de la mitología clásica.

Sin embargo, creo que hay cosas muy interesantes que contar y que, seguramente, muchos pueden aportar ideas curiosas acerca de esta "costumbre" de antaño.

¡Espero, como todas las semanas, vuestros comentarios!

El próximo jueves hablaremos despacio sobre esto...

martes, 27 de abril de 2010

Vendido el "Amor y Psique" de Bouguereau en Sotheby's

Hace tiempo hablamos de "Amor y Psique", a propósito de esta obra de William-Adolphe Bouguereau (1825-1905) que sacaba a pujas Sotheby's en su subasta del 23 de abril en Nueva York.

La estimación oscilaba entre 1,3 y 1,6 millones de euros para alcanzar un remate de 1.661.043 euros.

La subasta, dedicada a la pintura decimonónica, recaudó un total superior a 31,2 millones de dólares.









Se puede ver en: http://cuadrosparaunaexposicion.blogspot.com/2010/03/amor-y-psique-en-sothebys.html







viernes, 23 de abril de 2010

Una magnífica Virgen de Bartomeu de Robio en Balcli's

La sala de subastas barcelonesa Balcli's está preparando una subasta de mayo con piezas de excepción.

Entre las esculturas que ofrecerá los próximos días 19 y 20 de mayo, además de un San Jerónimo de Francisco Salzillo, que partirá de 60.000 €, destaca especialmente la Virgen de Bellpuig de les Avellanes. Esta escultura, realizada en piedra caliza policromada por Bartomeu de Robio, autor del retablo de la Seu Vella -hoy desaparecido- y documentado entre 1359 y 1379. La obra, originariamente en el monasterio de Bellpuig de les Avellanes, pasó a manos del banquero Agustí Santesmasses en 1894, quien la vendió al filántropo, y amigo de Ramón Casas, Charles Deering, que a su vez la regaló, pasado un tiempo, a un coleccionista particular. Sale ahora a la venta con un precio de 120.000 €.

La extraordinaria calidad de la pieza, junto a su perfecta conservación, en la que destaca especialmente la policromía, la convierte en una obra extraordinaria en el panorama de nuestro mercado del arte.


jueves, 22 de abril de 2010

Una escena de la mitología clásica: Pigmalión y Galatea

Nos toca hoy descubrir la escena mitológica del pasado miércoles.

Fueron varias, y muy buenas, las pistas que disteis: se aludió a las Metamorfosis y a obras de Bernard Shaw y Cervantes, y todo nos llevaba, efectivamente, hasta el título de este lienzo. Pigmalión y Galatea.

La pintura, realizada por el francés Jean Léon Gérôme hacia 1890, se encuentra hoy en el Metropolitan de Nueva York.

La leyenda se narra en las Metamorfosis de Ovidio (X, 243-297), donde se dice que Pigmalión -rey de Chipre según algunas versiones-, cansado de las maldades y vicios de las mujeres, vivía soltero y sin ningún tipo de compañía femenina. Se había dedicado a esculpir en mármol la imagen de una mujer, más hermosa que cualquiera de las mortales y, tanto llegó a admirar su obra, que acabó enamorándose de ella.

El día en que Chipre celebraba la celebración de su diosa Venus, Pigmalión pidió a los dioses que la hicieran su esposa. El deseo se hizo realidad; Galatea cobró vida y se casaron, engendrando un hijo al que llamarían Pafos.


El arte tiende a representar el momento en que, después de que la estatua tome forma humana, ambos amantes se unen en un beso, como en el lienzo de Gérôme, aunque Bronzino (imagen izquierda), por ejemplo, eligió el instante inmediatamente anterior, en el que Pigmalión ha hecho su ofrenda a los dioses y les pide, ante la estatua, que ésta se haga de carne y hueso.

Esta leyenda ha dado lugar al conocido como "efecto Pigmalión", según el cual, una persona consigue un objetivo porque ha creído ciegamente en que lo lograría.










Fuente: Ovidio, Metamorfosis, en la web de la Biblioteca Virtual Cervantes: http://www.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/12257292019032617210213/p0000010.htm#I_28_
Imágenes: http://www.jeanleongerome.org/; http://es.wikipedia.org/wiki/Pigmalión

miércoles, 21 de abril de 2010

Una nueva escena para identificar


Mañana jueves veremos la solución de la "iconografía oculta" propuesta la semana pasada. Mientras, aquí traigo otra escena que tampoco creo que sea demasiado difícil. ¡Seguro que muchos saben de qué se trata!

Espero, como siempre, vuestras pistas...

Y el jueves de la semana que viene daremos la solución.

jueves, 15 de abril de 2010

350.000 € por el "Beato Tomás de Zumárraga", de Zurbarán


La sala sevillana Arte, Información y Gestión sacaba ayer a subasta un óleo sobre lienzo (122 x 99 cm) de Zurbarán. Se trata del Beato Tomás de Zumárraga, obra que no ha salido de Sevilla desde su creación.
Este fraile, misionero dominico y originario de Vitoria, donde nació en 1577, hizo profesión de fe en el convento de Salamanca bajo el nombre de fray Tomás del Espíritu Santo. Después de estudiar en Valladolid y ser ordenado sacerdote, partió hacia Filipinas en 1602. Al año siguiente se dirigió a Japón, siendo apresado en Omura, en 1617, y muriendo martirizado en la hoguera el 10 de septiembre de 1622.
Probablemente (y según el catálogo de la subasta), el lienzo formó parte de una serie, hoy perdida, de los diez mártires dominicos muertos en Nagasaki entre 1617 y 1627. Zurbarán no insiste en los aspectos más cruentos del suplicio; sólo lo presenta con las manos a la espalda y la alusión al fuego donde moriría el dominico en la parte inferior derecha.
Las representaciones de los misioneros dominicos muertos en Japón, un total de doscientos cinco personajes que serían beatificados en 1867 por Pío IX, son muy escasas. En el caso del beato Tomás de Zumárraga, ésta es la única conocida. Partía de un precio de 350.000 €, por el que se adjudicó a un comprador anónimo que pujaba por teléfono.

Fuentes: catálogo de la subasta de Arte, Información y gestión, del 14 de abril de 2010, p. 106 (lote 365); http://www.elmundo.es/elmundo/2010/04/14/andalucia_sevilla/1271272241.html
Imagen: http://www.arteinfo.es/Imagenes/365g.jpg

miércoles, 14 de abril de 2010

Una escena de la mitología clásica

Para esta semana, después de algún tiempo sin ofrecer ningún nuevo "reto", propongo esta imagen y, aunque creo que el asunto iconográfico es bastante fácil de identificar, tanto la historia como esta obra en cuestión me parecen muy bonitas.

Tal vez alguien puede dar alguna pista, sin descifrar la iconografía representada...

viernes, 9 de abril de 2010

La crucifixión de san Andrés


Fue san Andrés el primero en seguir a Jesús. Hermano mayor de san Pedro y también pescador, en los Evangelios aparece dos veces, aunque su leyenda se enriquece gracias a textos apócrifos. Se supone que, tras la muerte de Cristo, fue designado para evangelizar Rusia.

Se le apareció un ángel, indicándole que debía visitar a san Mateo en Etiopía, y de forma milagrosa fue llevado hasta él. Se encontró con que le habían sacado los ojos, pero el Señor se los devolvió. Liberado Mateo, Andrés fue capturado y torturado, aunque logró sobrevivir.

Muchos son los milagros que se narran de este santo y, finalmente, se dice que en el Peloponeso fue azotado por orden del procónsul Egeas y, después, amarrado con cuerdas a una cruz en forma de X, se le dejó morir.


Será éste su atributo más popular, la cruz de san Andrés o cruz de Borgoña (a la derecha, la escultura de Duquesnoy para la basílica de San Pedro del Vaticano), llamada así porque en 1433, el duque Felipe el Bueno, habiendo recibido un fragmento de esta reliquia, la convirtió en la insignia de su orden del Toisón de Oro.

En las representaciones artísticas, la cruz en aspa no se adoptó hasta el siglo XV, aunque se encuentran algunos ejemplos desde el X, y se plasmaba frecuentemente como una cruz latina semejante a aquella en la que Jesús sufrió su tormento. Aunque en el siglo XVII ésta ya no era habitual, Caravaggio, en su lienzo del Museo de Cleveland (hacia 1607, imagen superior) la utiliza para reflejar el último momento del apóstol. Según la Leyenda Dorada, el santo estuvo dos días así, muriendo al tercero. Egeas, su verdugo, cuando vio a la población amotinada porque iba a ejecutar a un inocente, ordenó desatarle, pero ya era tarde: los sayones que intentan librarle de las cuerdas quedan paralizados al instante.


De todas las posibles escenas en que puede aparecer san Andrés, su crucifixión es la más habitual.


Fuentes: Voragine, Santiago de la, La Leyenda Dorada. Réau, Louis, Iconografía del arte cristiano, Iconografía de los santos (A-F)