viernes, 25 de noviembre de 2011

Una celebración bíblica: el festín de Baltasar

La pieza que proponíamos había salido a subasta en Sotheby's, en diciembre de 2003, y es una obra de Johann Memmingen.
El episodio es el conocido con el nombre de "El festín de Baltasar" y está narrado en el Libro de Daniel, 5.
Baltasar era el hijo y heredero de Nabucodonosor, rey de Babilonia que había tomado los vasos sagrados de oro y plata del templo de Jerusalén. Decidido a dar un banquete a todos sus príncipes, y excitado por el vino, manda Baltasar que se sirva a sus invitados, esposas y concubinas en dichos vasos. Así se hizo, y mientras bebían y brindaban alabanzas a sus dioses, observa, espantado, cómo una mano (se puede ver en el muro de la izquierda, en nuestra obra) escribe las palabras "Mené, tequel, ufarsin" en la pared de la sala donde está celebrando su banquete.
Como sus magos no logran descifrar la inscripción, acude a Daniel, que las interpreta de la siguiente manera:
Contado: Dios ha contado los días de tu reinado y les ha puesto fin.
Pesado: Has sido pesado en la balanza y eres muy ligero.
Dividido: Tu reino será dividido entre los reinos y los persas.
Aquella misma noche, Baltasar muere a manos de Darío, rey de los medos.

La imagen inferior muestra otra versión, atribuida a Louis de Caulery, que también Sotheby's había sacado a la venta, pero en julio de 2004. Aunque no se aprecia bien, la mano escribiendo en la pared aparece junto a la mesa del fondo, en el lado derecho.

Bibliografía: Louis RÉAU, Iconografía del arte cristiano. Iconografía de la Biblia-Antiguo Testamento, Barcelona, Del Serbal, 1996, p. 465

Imágenes. Sotheby's.com










miércoles, 23 de noviembre de 2011

Un fragmento tallado

Para la próxima semana, hemos elegido esta talla que, en realidad sería sólo una parte de una escena concreta mucho más amplia.

Sin embargo, el fragmento es tan representativo que sirve perfectamente para identificar el asunto iconográfico.


sábado, 19 de noviembre de 2011

Un nuevo personaje con un ángel: Elías

Aquí está la imagen que habíamos propuesto la pasada semana.



Se trata de un óleo sobre lienzo de Felipe Gil de Mena (1603-1673) localizado en el Museo Nacional Colegio de San Gregorio, en Valladolid.



Representa un episodio de la vida del profeta Elías (II Reyes, 19), cuyo nombre significa "Mi Dios es Yavé", en el que se narra cómo tuvo que huir de la cólera de la reina Jezabel y, en el desierto, desesperado por la situación, fue socorrido por un ángel, que le llevó pan y agua, con los que pudo caminar durante cuarenta días y cuarenta noches .



Se ha considerado una prefiguración eucarística, como tantos otros momentos del Antiguo Testamento.




Además de un físico de anciano barbado, como es habitual, lleva su característica espada flamígera, que recuerda la llama caída del cielo después de que desafiara a los sacerdotes del dios Baal en el monte Carmelo. Vestido con túnica marrón y capa blanca, que será el habito de los carmelitas, quienes lo reivindican como fundador de su orden, a veces puede llevar una piel de cabra, también.



Quizá una de las imágenes más famosas que plasman esta escena es la tabla de Dierick Bouts (derecha), que forma parte de su tríptico del Santísimo Sacramento, en la iglesia de San Pedro de Lovaina. Al contrario de lo que resulta habitual, el pintor flamenco no lo representa como anciano, y tanto el pan como el agua aparecen en el suelo en un segundo plano, en vez de llevados por el ángel.




Bibliografía: Louis RÉAU, Iconografía de la Biblia. Antiguo Testamento, Barcelona, Del Serbal, 1996, pp. 401-412




miércoles, 16 de noviembre de 2011

Una celebración bíblica



De nuevo, dejamos un poco a nuestros santos para ofrecer una escena narrativa.


No sé lo fácil o difícil que pueda resultar, pero desde luego hay un detalle, quizá poco visible, que nos indica sin lugar a dudas la pista clave para descubrir el asunto narrado.


¡A ver si lo descubrimos!

martes, 15 de noviembre de 2011

Christie's subasta una Virgen con el Niño gótica

Christie's París ofrece, dentro de su subasta dedicada a las obras medievales de la colección Marquet Vasselot, este grupo en mármol.

Se trata de una imagen de la Virgen entronizada con el Niño datada entre 1250 y 1280 cuya estimación de salida oscila entre el millón y los dos millones de euros.

La venta se celebrará mañana 16 de noviembre y, además de este lote, se verán, por ejemplo, una placa de marfil con la Crucifixión, fechada en el tercer cuarto del siglo X (300.000-500.000 €), o un antifonario al uso franciscano en latín (hacia 1310, imagen derecha. 250.000-350.000 €).

Con estas piezas y estas estimaciones, será sin duda una subasta interesante.

viernes, 11 de noviembre de 2011

Los museos españoles en línea: CER.ES

Para todos aquellos que siguen interesados en encontrar imágenes de arte, y además, en este caso, con una catalogación de cada pieza, sólo tienen que pinchar en el siguiente enlace:







Se trata de la Red Digital de Colecciones de Museos de España (CER.ES -colecciones en red-) y es un recurso que nos facilita más de 144.000 bienes culturales y más de 210.000 imágenes pertenecientes a un total de 72 museos de nuestro país.



La búsqueda es realmente fácil y la información que nos aportan, muy, muy interesante. Espero que os sea de tanta utilidad como a mí.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Un episodio poco conocido de un santo muy famoso: san Antón

En nuestro anterior reto proponíamos esta imagen.


Se trata de san Antonio Abad, tentado por un pedazo de oro, de Fra Angelico. La tabla se encuentra en el museo de Bellas Artes de Houston y esta fechado hacia 1436.

Este santo, nacido hacia 251 en Egipto, es conocido también como san Antón o san Antonio de Viana. Siendo muy joven, se retiró al desierto, donde sería asaltado por unas diabólicas tentaciones encarnadas en varias mujeres que se le insinúan sexualmente así como en diferentes demonios que le golpean o lo lanzan al aire.

De hecho, en el desierto del Mar Rojo existen dos monasterios coptos del siglo IV, los más antiguos del mundo cristiano, dedicados a este santo uno, y a san Pablo ermitaño el otro.


La escena que tenemos aquí hoy está narrada en la Leyenda Dorada, donde se dice que, yendo un día por un camino, se encontró con una bandeja de plata, dándose cuenta en seguida de que era otra estratagema del demonio para hacerle pecar.

No es el momento más representado de su vida, aunque algunas veces podemos encontrarlo y, como en este caso, con la variante de que sea un trozo u objeto de oro lo que se encuentre en medio de su camino. Es interesante fijarse en el tipo iconográfico del santo, que nos dará las pistas necesarias para identificarle: habitualmente se le represente como un anciano barbado que viste el sayal con capucha marrón de los componentes de su orden, los antonitas. Además, como atributos, suele llevar una tau o cruz potenzada, de la que cuelga una esquila -a veces va en la mano, y es el atributo de los ermitaños, que la hacían sonar para espantar a los demonios- y un cerdo, que es su animal porque el tocino era considerado como un remedio eficaz para curar el fuego de san Antón.

Por esta enfermedad -llamada "ergotismo" y producida por el consumo de pan de centeno contaminado por un hongo (el cornezuelo)- lleva además unas llamas en las manos, sobre un libro o a sus pies, conocidas como "llamas de san Antón". Por confusión, estas llamas pasaron a la figura de san Antonio de Padua, que algunas veces las lleva también.

En la imagen de la derecha, del Maestro de la Porciúncula, en el Museo de Bellas Artes de Castellón, se puede ver perfectamente cada uno de estos elementos a excepción, curiosamente, del más frecuente, que es el cerdo.


Aquí tenemos otro post relacionado: http://http//cuadrosparaunaexposicion.blogspot.com/2009/12/zurbaran-subasta-en-fernando-duran-san.html


Bibliografía: Louis RÉAU, Iconografía de los santos A-F, Barcelona, Del Serbal, 1997, pp. 108-123. Santiago de la Voragine, La leyenda dorada, t. I, Madrid, Alianza Editorial, 1996, pp. 107-111


Imágenes: en esta ocasión, no puedo especificar su procedencia. Pertenecen a una base de datos que comencé hace mucho tiempo y, aunque la mayoría de ellas proceden de Internet, y no creo que sea difícil localizarlas, hay muchas otras de libros y catálogos de subastas.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Un nuevo personaje con un ángel

Para la próxima semana tenemos otra imagen, con un personaje anciano acompañado por un ángel.

¿Alguien tiene ya alguna idea de quién puede ser?

lunes, 7 de noviembre de 2011

Un nuevo episodio bíblico: la curación de Tobit

Aquí estamos de nuevo con "La curación de Tobit", escena del Antiguo Testamento que proponíamos hace ya algunas semanas.


Se trata de un óleo sobre lienzo de Paul Troger (1698-1762) localizado en la Residenzgalerie de Salzburgo y realizado en la primera mitad del XVIII.



El relato estaba narrado en un texto griego fechado hacia 150 a. C., y cuyo original hebreo no se ha localizado, el llamado Libro de Tobías. Los protestantes lo consideran apócrifo, por lo que lo han excluido de la Biblia y, además, argumentan que fomenta el culto de los ángeles, condenado por ellos como una superchería.

Según la versión utilizada, podemos encontrarnos con que los dos personajes, padre e hijo, se llaman Tobías, y así aparecen en la traducción latina de la Vulgata. En España, tenemos una edición de la Biblia por Nácar y Colunga en la que se llama Tobit al padre para poder diferenciarlo de su hijo.

En cualquier caso, la historia nos dice que Tobit, exiliado en Nínive, se dedicaba a enterrar de forma clandestina a los hebreos muertos por Senaquerib. Una noche salió a dormir a la puerta de su casa, sin saber que unos pájaros habían anidado justo sobre el lugar en el que él estaba echado y fue así como quedó ciego, a causa de los excrementos de estos animales que cayeron en sus ojos.



Entonces, encargó a su hijo Tobías que buscara un compañero y fuera a cobrar una deuda que le debía Gabael. Para cumplir con ello, fue acompañado por el arcángel Rafael, quien no descubrió su verdadera identidad, haciéndose llamar Azarías.

De camino el ángel hizo que el joven capturase un

pez -momento mucho más representado en el arte- y guardar su corazón, su hígado y su hiel. Con los dos primeros órganos expulsó a Asmodeo, el demonio que Sara, la hija

de Ragüel, tenía en su cuerpo, para poder casarse con ella y, con la hiel, curó los ojos ciegos de su padre al regresar a su casa. Es éste el momento elegido por Troger y también por Domenico Fetti para una pintura realizada en 1620-1623 (izquierda) y hoy en el Ermitage de San Petersburgo.


Iconográficamente, es fácil identificar esta escena, pues aparece el padre, normalmente sentado y con los ojos cerrados, y su hijo, a su lado o detrás de él, le frota los ojos con la hiel tomada del pez. Además, Ana -la esposa de Tobit-, el ángel, e incluso el perro que acompañó al joven en su aventura, suelen estar también presentes.



Bibliografía: Louis RÉAU, Iconografía de la Biblia. Antiguo testamento, Barcelona, Del Serbal, 1996, pp. 368-378

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Un episodio poco conocido de un santo muy famoso

Después de algún tiempo ausente, por cuestiones laborales (y por mi tesis, que me tiene bastante "absorbida"), aquí volvemos a proponer otro asunto iconográfico para descifrar.

Se trata de un santo muy famoso, aunque este episodio de su vida no es, precisamente, el más conocido ni representado. ¡Mucho ánimo con la "investigación"!