¿Alguien tiene ya alguna idea de quién puede ser?
Iconografía oculta
Un apartado en el que todo el mundo puede participar. Cada semana os invito, a modo de juego, a descubrir qué se representa en una imagen. Podemos, entre todos, ir aportando pistas que, sin desvelar por completo el asunto, nos acerquen a la solución. Si tenéis interés por la iconografía, tanto cristiana como clásica, os animo a que enviéis vuestras opiniones. ¡Será divertido!
miércoles, 9 de noviembre de 2011
Un nuevo personaje con un ángel
Para la próxima semana tenemos otra imagen, con un personaje anciano acompañado por un ángel.
Etiquetas:
Antiguo Testamento,
Iconografía cristiana,
Iconografía oculta
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Podría ser un santo mártir, de la orden que indica su hábito, y que se encontró en una ocasión con dos santos muy célebres. La empuñadura que se ve a su espalda, sin embargo, me despista por su posición.
ResponderEliminarJesús.
Hola Jesús:
ResponderEliminarTengo la impresión de que no estamos pensando en el mismo personaje.
Por si te ayuda, te diré que, de no haber sido por él, habría una persona que no podría haber sido vomitada por un cetáceo...
En cuanto a la espada, es del mismo tipo de la que en ocasiones porta el arcángel san Miguel.
Un saludo,
Raquel
Por tiempo, ordenador con virus desde el día 6, y poca idea, no acabo de encontrar la solución, pero seguiré intentándolo. Estaba bastante seguro de mi error pero fue lo único que averigüé. De cetáceos sólo recuerdo el caso de Jonás, en el que no hay ningún ángel involucrado.
ResponderEliminarJesús.
Hola Jesús:
ResponderEliminarSí, a Jonás me refiero. Es que, de no ser por este personje que tenemos aquí con el ángel, el pobre Jonás no habría ni siquiera llegado a ser tragado por la ballena.
Esta pista creo que va a ser definitiva, aunque tal vez un poco enrevesada: acompañó a Moisés ante Jesús.
¿Mejor ahora?
Lo dejaremos un par de días más antes de resolverlo, por si hay alguien que quiera investigar un poco más sobre este tema. ¡Mucho ánimo!
Ya he visto que has dado la solución.
ResponderEliminarUn saludo.
Jesús.
Pues ha sido un error mío...
ResponderEliminarQuería publicar el post de la solución más adelante, para dejar algún tiempo más y que se pudiera continuar investigando un poco, pero no me acordaba de que lo había dejado programado para que se autopublicara hoy...
Bueno, ¡seguro que encontramos nuevos retos en los que podamos mantener la intriga durante más días!
Un saludo, Raquel