Para los días 10 y 11 de mayo, Fernando Durán tiene preparada una magnífica subasta (como viene siendo habitual en esta casa), donde se podrán ver piezas de magnífica calidad. A mí me ha llamado la atención este relieve, del que veremos más datos, por su iconografía.
La catalogación de la sala proponía que se trataba de la imagen de María Magdalena.
Yo lo dejo como "reto" para la próxima semana. A ver si podemos ir dando algunos datos que nos puedan indicar si en verdad es la Magdalena o se trata de otra figura.
Mucho ánimo y vayamos dando ideas poco a poco, para poder mantener el juego durante más tiempo.
No lo tengo del todo claro pero, si no es la Magdalena -en cuyas representaciones suele aparecer la calavera o el frasco de perfumes-, creo que lo único que podría diferenciarlas es la representación del Santísimo Sacramento. Esto podría reflejar el deseo de la santa penitente de que le llevaran la comunión y poder comulgar antes de morir.
ResponderEliminarDe nuevo intento participar, una vez pasado el período de vacaciones y el paréntesis debido al destripamiento adicional que sufrió el santo con dos cabezas. Con algo de fe me atrevo a proponer que se trata de una alegoría.
ResponderEliminarJesús.
¡Hola a todos!
ResponderEliminarJosé: muy buena observación la tuya. No estaba mal pensado que pudiera relacionarse con el deseo de la santa de comulgar antes de su muerte aunque, efectivamente, nos faltaría la calavera y el frasco de perfume para que pudiéramos hablar de la Magdalena. Jesús apunta a una alegoría, y va muy bien encaminado.
A ver si alguien más comenta otra cosa.
Saludos, Raquel
La desnudez de la figura me hizo pensar en otra santa penitente (con parecidos iconográficos con la Magdalena) que quiso recibir la comunión antes de su muerte, casualmente, en unos días señalados que han pasado muy recientemente.
ResponderEliminarSaludos
Jose, creía que te referías a la última comunión de la Magdalena en tu primer comentario... Bueno, de todos modos: ¿has llegado ya a alguna conclusión? ¡Veremos la solución en unos días!
ResponderEliminarSaludos, Raquel